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Cholulteca. Quesque actor de teatro. Dedicado a la publicidad. Amante de la música (la buena), el vino (el bueno, sobre todo tinto) y la lectura. Y por supuesto, escribir en este blog.

octubre 07, 2008

El teatro me da y me quita



Hace muchos años yo era chico tímido que no se atrevía a pedir su comida en un restaurante y por lo tanto necesitaba de su mamá para hacerlo. Siempre había sido un niño inseguro y con baja autoestima hasta que descubrí el teatro y las cosas cambiaron para siempre.

Todavía recuerdo que fue en segundo de secundaria cuando nos solicitaron realizar un monólogo presentándonos como un personaje famoso y yo personifiqué a Don Quijote de la Mancha. La maestra quedó maravillada con mi monólogo y me propuso participar en la semana cultural que se presentaría en la preparatoria a lo que accedí, sin tener plena consciencia de en lo que me estaba metiendo.

La presentación fue todo un éxito y así empezó mi historia con el teatro. Una relación que me ha dado mucho y me ha quitado algunas cosas.

Lo que me ha dado

Amistades: muchos de mis mejores amigos los he conseguido, sino gracias al teatro, sí a través de las experiencias teatrales. Especialmente a Germán, a Pepe, a la familia de Santos, los Piratas y a mis hijas postizas. Otras las he podido cultivar de mejor manera a partir de la experiencia de compartir escenario como LuisG, Lalo, Toña, Axel, Morris, Maggi, Cinthya, Patty y tantos otros.

Satisfacciones: Son muchas. Por mencionar algunas: comenzar como staff en primero de prepa y terminar en el papel principal en tercero; regresar a actuar en un emotivo festival para conmemorar el aniversario del Colegio Americano de Puebla y del grupo de teatro del colegio; montar una obra original escrita por nuestro amigo, compañero y director Germán de Santos;

Experiencias inolvidables: Cuando me tocó interpretar a Sor Humberta, la jefa de novicias, en la obra Sor-presas montada por puros hombres. Cuando me tocó

Aprendizajes: A trabajar en equipo, a dominar el arte de paciencia, a ayudar como staff tanto en las piernas como en la cabina, etc.

Perder mi timidez: Creo que esto es lo más importante puesto que me ha permitido desenvolverme muy bien en la vida al grado de que ahora he sido capaz de dar clases, ser maestro de ceremonias en congresos e incluso dar conferencias. Por supuesto ya puedo ir a comer a un restaurante sin mi mamá y pedir todo lo que se me antoja.

Un amor: Gina.

Lo que me ha quitado

Tiempo: La mitad de mis sábados y tantas tardes entre semana en las que iba a los ensayos dejando de hacer otras muchas cosas.
Oportunidades: Asistir a eventos especiales como conciertos, obras de teatro, premieres o fiestas de agencias; o participar en otro tipo de cosas como juntas de trabajo o eventos de integración.

A mi amor: El amor que el teatro me dio, el teatro me lo quita. Gina se fue a Xalapa a seguir su instinto buscando la formación formal como actriz / dramaturga dejándome aquí en Cholula extrañándola.

Sin embargo cuando hago el balance la verdad es que no tengo queja. Lo que me ha dado el teatro sobre pasa por mucho lo que me ha quitado y sin duda alguna afirmo que todo lo volvería a hacer igual si tuviera la opción de decidir de nuevo.

Amo el teatro. Me encanta pararme arriba de un escenario sobre todo cuando la obra permite interactuar con el público. Y recibir el aplauso del público también me provoca una de las dichas más especiales de la vida.

Espero poder continuar con mi hobbie y que pronto, muy pronto, pueda hacer mi sueño realidad con la creación de un lugar para poder dar rienda suelta a todos los proyectos que por alguna u otra razón se quedan en el tintero.

SiNfuLJaMeS

Mi abuelo


El domingo 28 de septiembre a las 2:37 de la mañana recibimos la llamada telefónica de mi tío que nos informaba que mi abuelo finalmente había fallecido después de casi dos meses de padecer en un hospital del seguro.


Era mi único abuelo vivo. El papá de mi mamá. El inglés. Con el que más parecido físico guardo; y sin embargo, el más distante a pesar de esa cercanía.


Ese abuelo aventurero que por azares del destino le tocó nacer en Sudáfrica cuando su papá -un financiero muy estirado de Londres- se fue a salvar el negocio de criadero de ovejas de su hermano en esa lejana nación.


El mismo abuelo que, después de pelear en la seguna guerra mundial en los frentes de Egipto e Italia dentro del ejército británico, decidió dejar europa y su miseria de la post-guerra para ir a probar suerte al salvaje México, y permitir así que mi familia existiera.


El abuelo que defendió siempre la causa de aquellos que a su juicio (y al de muchos de nosotros), necesitaban ser defendidos ya fueran escritores, pintores sin manos o simples vagabundos.


Aquel abuelo que vivió una historia de amor de película de Hollywood con todo y su final feliz, aunque no fue por el resto de sus días y finalmente se quedó solo muchos años llevando el luto en el corazón.


Y al final, después de todo, sólo puedo decir que me arrepiento de no haber tenido una relación más cercana con él. Me inclino a pensar que no se hubiera podido porque él siempre fue un poco retraído con nosotros, sin embargo eso me lleva a cuatro reflexiones...


La primera es que creo que sí pude haber hecho un esfuerzo por acercarme más pero con los pretextos de: "es que tengo que hablar con él en inglés" (que no era 100% cierto y tampoco un obstáculo, puesto que siento que hablo suficientemente bien), o el de "es que él está en el DF y yo en Xalapa/Puebla", o incluso el de "es que tengo mucho trabajo entre semana y los fines de semana son para descansar", nunca lo hice y hoy es muy tarde.


La segunda es que no debo dejar que me pase lo mismo: que la gente me vea tan distante que no se acerque; que me vea tan imponente por mi aspecto, mi voz o lo que sea, que no se atreva a entablar una plática sincera conmigo; que mi familia me conozca pero no por mí sino por mis actos o a través de otras personas.


También reflexioné algo más con su muerte: es triste que el único contacto que mantengo con mi familia se limita a bodas, funerales o navidad. Esto tengo que cambiarlo, aunque estoy consciente de lo que implicará para mí.


Y finalmente: no debemos tomar a la ligera algo tan importante como el seguro de gastos médicos mayores. Y en esta ocasión no lo digo solamente por mi abuelo que sufrió bastante con el trato que recibió de algunos doctores y enfermeras del IMSS, sino también por el trato recibido por mi mamá, mis tíos y tía, mis primos, mi hermana y todos los que estuvieron más cerca de mi abuelo en sus últimos días. Con decirles que tuvieron que velarlo en el hospital "pasando la noche" sentados sobre una incómoda silla al lado de la cama del enfermo. Y no digo nada de los baños del hospital o el trato de la gente que allí trabaja que no necesariamente son doctores o enfermeras.


Es una pena que nuestro servicio hospitalario sea tan malo en términos generales, pero en lo que se resuelve, tendremos que actuar nosotros para evitarnos esas penas a nosotros mismos y a nuestros familiares cercanos.


¿Alguien sabe de un vendedor de seguros de confianza?


Saludos y ¡Arrivederci, granpa!


SiNfuLJaMeS

agosto 06, 2008

La diferencia entre rpm, minutos y GB parte II


Me prometí a mi mismo que iba a publicar o matar definitivamente todas aquellas entradas que por alguna causa u otra quedaron en el tintero o, como es el caso, como entradas inconclusas que nunca tuvieron la oportunidad de ser publicadas. Esta es la primera de varias...


Después de un prolífico pasado lleno de cintas originales y grabadas dentro de las cuales llegué a tener rarezas como una de un grupo de hardrock que se llamó D.A.D. (y que se rumoraba que eran las siglas de Disneyland After Dark, super malotes ¿no?), otra de otro grupo metalero llamado Kingdom Come e incluso el primer disco de Eddie Brickell and the New Bohemians ("Shooting rubberbands at the sky") que compré en Oaxaca (sí, aunque parezca increíble durante un viaje de estudios en secundaria), comencé la era de los CD's.


Mi primer CD me lo regalaron en 1991. Se trataba de los éxitos de Poison interpretados en vivo. Creo que era un excelente CD. Y digo creo porque nunca lo pude escuchar. Tardé más de un año en tener un aparato que pudiera reproducir los discos compactos y para entonces mi primer disco ya no se encontraba en mis manos.


El aparato que tuve en el que podía interpretar los CD's lo compró mi papá a través de la despensa de El Sardinero que llegaba a la casa como una prestación más de Telmex. Era un equipo de sonido de una marca que no recuerdo y del cual mi papá compró dos unidades: una para la sala y la otra para uno de sus hijos. Nos lo jugamos a un volado entre mi hermana y yo y gané. Por supuesto le heredé mi grabadora negra con filitos rojos pero creo que de todos modos no le hizo mucha gracia.


Y así, ya con un aparato en el que podía escuchar CD's (y grabar del CD a cassette), sobreviví muchos años. Durante esos años comencé mi colección de CDs que hoy alcanza una cantidad bastante respetable aunque no recuerdo la cifra con exactitud (creo que ronda los 3,000).


Dentro de los CDs memorables puedo citar algunos:


Depeche Mode. Songs of faith and devotion. Este álbum en particular comenzaba con la rola "I feel you" que tenía una introducción que era prácticamente un sonido agudo muy penetrante. Con decirles que cuando lo puse por primera vez pensé que estaba mal mi aparato y hasta lo limpié con un CD limpiador especial. Y no conforme con eso, puesto que se seguía escuchando "mal", fui a la tienda a que lo revisaran. Por suerte no estuve presente durante la revisión y me ahorré el oso de que me dijeran: "no está mal, así es el disco".


La historia de Soda Stereo. Creo que este fue el disco que más escuché de los 17 a los 25 años. Particularmente me gusta la versión de "Estoy azulado" en vivo que venía en esa, la que fue la primera gran recopilación de Soda. Hoy hay tantas otras que no vale la pena ni mencionar aunque casi llega a esta lista el "Confort y música para volar", el Unplugged de Soda que fue todo menos eso: un un-plugged.


Peter Gabriel. Ovo. Este es un disco que relizó Peter Gabriel con motivo de la llegada del año 2000 y se trata de un disco concepto. Además de la música, que está poca madre por supuesto, dentro del CD se incluía una historia contada a través de una serie animada tipo comic. Algo muy vanguardista y peculiar con el sello indiscutible de Gabriel. También quedó en el Shortlist el "Passion. OST for the Last Temptation of Christ". Magistral disco también.


Pink Floyd. The final cut. Es el primer disco de Pink Floyd que compré ya que siempre había tenido sus producciones en cintas. Me encantó. Todavía a la fecha lo sigo escuchando de vez en cuando e incluso en algún momento tuve que recomprarlo porque un buen día mi versión original comenzó a fallar sin ralladuras aparentes. La integración de la voz con el sólo de saxofón es algo digno de aplaudirse de pie...


Pero bueno, todo lo maravilloso que tienen los CDs se va al carajo cuando lo toca la piratería. Sí, estoy totalmente en contra de la piratería porque si bien representan un llamado importante de atención respecto a los inflados y muchas veces injustificados precios que se manejan en los materiales originales en las tiendas, me parece aberrante que existan personas que sin haberse tomado la molestia siquiera de pagar las regalías correspondientes, lucren con el material artístico de los autores mediante el copiado no autorizado de los discos y su venta a través del mercado informal, lo que para colmo le da en la madre a nuestra economía.


Yo se que muy probablemente a artistas consolidados esto no les haga ni cosquillas, pero a los artistas que están empezando, a los que no tienen un contrato con las disqueras enormes, aquellos que muchas veces costean la producción de su material; si bien les conviene que su música se distribuya, dejan de ganar mientras unos vivarachos h.d.p. se benefician sin inmutarse siquiera.


Me parece que si bien algunos artistas han comenzado a combatir de manera frontal este problema ya sea mediante la venta de su música a través de internet o justificando la venta de un CD físico con la inclusión de material inédito (videos, fotos o cualquier otra cosa que ayude), falta todavía el esfuerzo de las disqueras y las distribuidoras por abaratar los materiales para poder mantener vivo ese canal de comercialización. Aunque cada día me convenzo más de que eso es lo que menos les importa.


Pero bueno, después de la salida al mercado de los discos compactos comenzó la era de la música digital lo que implica una eventual muerte del CD, aunque ese será el tema de la parte III. Por lo pronto, y para terminar, me limitaré a decir que si sigo sintiendo añoranza por mis cintas imaginen lo que me sucederá con los CDs cuando no haya aparatos en los cuales escucharlos... será un día verdaderamente negro para mí y mi colección de CDs pasará a ser obsoleta.


El SiNfuLJaMeS

julio 28, 2008

Tolerancia

No tengo intención alguna de hablar de los motivos de mi ausencia. Sin embargo sí tengo motivos para hablar de mi presencia: por obra y gracia de alguien (que no se quién es), ya puedo visitar blogs en la oficina e incluso, como en este momento, postear.

Hoy quiero hablar de tolerancia. Esta palabrita que describe una cosa tan etérea y a veces tan distante pero necesaria, sobre todo en nuestros días.

Resulta que ayer, durante mi asistencia a dos eventos de nutrida convocatoria, tuve oportunidad de cuestionarme personalmente sobre mi nivel de tolerancia. Muchas veces me he sorprendido a mí mismo pensando posibles respuestas completamente de manera intolerante y, aunque en el momento mi reacción fuera espontánea, no es justificable.

Lo que me sucedió fue mas o menos lo siguiente...

Primero asistí al futbol a ver el debut del Puebla en la temporada enfrentando al Monterrey de Lavolpe. La temporada pasada decía que iba al fut porque me regalaban los boletos, pero ya me atrevo a decir que voy al fut porque me gusta. Eso sí, sigo siendo fiel al rebaño sagrado y, aunque siento emoción cuando el Puebla anota gol, no cambiaría nunca mi afición por el Guadalajara.

Pero bueno, el caso es que estaba yo sentado en mi butaca cuando llegó una persona con su playera del Monterrey y se sentó en la fila de adelante a cinco a asientos de los nuestros. Traía gorra y lentes oscuros y desde que llegó me dio la impresión de ser sangre pesada, además de que llegó diciendo como histe que se sentó en esta zona porque había alguien más con la playera regia.

Comenzó el partido y el Puebla anotó al minuto dos por lo que ni tardo ni perezoso comenzó a lanzar comentarios ofensivos en contra del local, lo que empezó a fastidiarme. Y fue entonces cuando mis pensamientos comenzaron a asaltarme:

Pensé en aventarle los cacahuates que había comprado. Después en gritarle majaderías. Después en pedirle amablemente que se fuera a la zona en la que estaba su porra (que por cierto, era el extremo contrario exacto de donde estábamos). Después en advertirle que si seguía así corría grave peligro y no sólo lo diría por mí. Pero al final reflexioné y permanecí callado. Comprendí que él tenía todo el derecho de decir lo que piensa, por mucho que me molestara y en eso finalmente se traduce la tolerancia.

Claro, yo en su lugar hubiera sido más prudente y no hubiera gritado lo que él gritó, pero resultó altamente gratificante que él pudo hablar todo lo que quiso sin que nadie se metiera ni que saliéramos en la nota televisiva con algo como "Riña en el Cuauhtémoc". Por supuesto que el partido terminó 2-2 y el Puebla nunca estuvo abajo, lo que talvez le dió cierta ventaja.

La otra ocasión que tuve de probar mi tolerancia, fue en una exposición a la que asistí también ayer. Se trata de una exposición de burjería en el San Pedro Museo de Arte.

La verdad es que no he tenido muy buena suerte con las visitas a ese museo y esta no fue la excepción. Entramos al museo y hasta que llegamos a la entrada del ala en donde está la exposición (segundo piso al fondo), nos dicen que necesitamos el boleto pagado que venden a la entrada. Nimodo, eso seguramente aumentó la posibilidad de encontrarme a alguien molesto y creo que al final lo conseguí.

Finalmente logramos entrar (pagando $50.00 yo y $35.00 Gina como estudiante), y comenzó el recorrido. La guardia, aleccionada o no, lo advirtió desde el inicio: "El recorrido comienza a su izquiera y pueden ir leyendo la información, si gustan", enfatizando esta última frase. Eso no tuvo ningún sentido hasta llegar a la primera vitrina.

Para mí se convirtió en un martirio porque la "información" estaba situada en cartones de 40 x 15 cms con letra de 18 puntos, detrás del cristal y en el punto más bajo de las vitrinas, que era como a 1.2 metros del nivel del suelo y con una tabla de unos treinta cms separándonos del cristal. O sea que cada vez que alguien se paraba justo enfrente para leer, invariablemente impedía que los demás pudieran hacer lo propio.

Así pasé la mitad del recorrido tratando de leer por encima de las personas y elogiándome por mi facilidad para esto dada mi altura y mi lectura-veloz-y-de-comprensión hasta que un muchacho de mi estatura con una playera con el logotipo de Superior, tuvo a bien colocarse delante de mi ángulo de visión DEMASIADAS veces.

Llegué a considerar que lo hacía a propósito y estuve a nada de darle un ocasional codazo o pisotón acompañado del "disculpe, no me fijé", pero me controlé. Después de todo era imposible que lo hiciera a propósito porque ni cuenta se daba de que yo estaba detrás. Además, nunca he sido una persona violenta y esa no era la ocasión para empezar a serlo.

Al final me tranquilicé recordando el incidente en el estadio y lo reconfortante que había resultado el no decir ni hacer nada. La exposición siguió ahí y lo único que tuve que hacer es perder el tiempo para evitar encontrármelo en las siguientes vitrinas.

Claro, también recapacité en el hecho de que él tenía todo el derecho de leer la información como le diera la gana y, puesto que yo era el intruso extraño que intentaba leer desde una segunda fila por encima de las cabezas en lugar de "hacer fila" delante de las fichas, el hecho de que se moviera osbtruyendo mi visión no era un acto premeditado sino una reacción normal.

En esta ocasión no me felicité ni nada. Tuve un mal sabor de boca que no tuvo nada que ver con la tolerancia sino con los organizadores. Al final la exposición me decepcionó un tanto por varias razones, aunque no creo que sean las suficientes para una entrada en particular.

No así los dos ejercicios de tolerancia que practiqué sin proponérmelo. Eso sí, no quiero pensar qué hubiera hecho si en lugar de un aficionado del Monterrey hubiera sido uno del América, o si hubiera econtrado algún indicio de que la actitud del muchacho con la playera de Superior era con la intención de molestar.

O talvez que quien fuera el objeto de mi análisis fuera alguien a quien desde hace mucho he demostrado certa intolerancia como AMLO y sus desmanes, los taka-takas preguntones, los bebés en la edad del por qué o los pendejos.

Afortunadamente eso no ha sucedido y puedo decir que, ayer domingo, pasé las dos pruebas de tolerancia a las que fui sometido.

Saludos,

SinFuLJaMeS

P.D. Y por cierto, el Puebla se merecía la victoria, por más que el aficionado regiomontano gritara que el Chelís estuviera en contubernio con el arbitraje, misma idea que tenía yo pero en sentido contrario pensando en Lavolpe y su norteño séquito. Como verán extraño mi blog futbolero, jejeje.

junio 18, 2008

¿Qué onda con el clima?

La verdad es que quise decir: ¿qué pedo con el clima?, pero se me hizo un poco rudo empezar con algo así esta entrada.

Hoy salí de la oficina como a las 6:30 de la tarde y todavía había sol. Contrario a lo que venía pasando de un par de semanas para acá, la tarde pintaba para algo rico con un poco de aire fresco recorriendo las calles, fríito pero no como para ponerte chamarra, el sol de fondo, en fin, hasta romántico por momentos.

Sin embargo, en menos de un santiamén (que dicho sea de paso siempre me ha parecido una palabra muy curiosa), el cielo se nubló y comenzaron a caer del cielo pedazos de hielo mejor conocidos como granizo. Y a pa'granizada. Curiosamente me paré unos minutos en el estacionamiento de un Oxxo a que pasara lo peor de la tormenta cuando me entró una llamada de la agencia al celular. La persona del otro lado de la línea no me creía que lo que se escuchaba eran los granizos pegando sobre el auto y yo solo rezaba para que esos granizos no estuvieran abollando la lámina del auto. Y todavía lo sigo dudando.

Y es que la neta es que el clima en la ciudad de Puebla está irreconocible. Yo recuerdo cuando era más chico (uuuuuuuu, dirán algunos, lo se y lo acepto), sí había temporada de lluvias y si llovía, pero no todos los días y en estas cantidades. Ahora es raro el día en el que no amanece nublado y más raro aún el día en el que por la tarde no llueve.

Gina dice que se debe a que hace poco talaron una zona boscosa cerca de la capital y que eso está ocasionando un desorden climatológico. La verdad es que la razón no suena nada descabellada aunque sí me da mucho miedo pensarlo y sobre todo me lleva a una inevitable conclusión: el sobrecalentamiento global.

No voy a echar el choro mareador de nos vamos a ir a la mierda si no hacemos nada, lo que sí haré es comprometerme conmigo mismo desde hoy a comenzar a actuar localmente para minimizar estos efectos: reciclar, reutilizar, cuidar, no desperdiciar... y rezar para que los demócratas lleguen de nuevo a la Casa Blanca para que por lo menos haya alguien pensante al frente de la nación más contaminante del planeta y los únicos que no quieren firmar el protocolo de Kyoto.

En fín, me despido desde Cholula agradeciendo que no siga lloviendo a esta hora, aunque con algunas cosas mojadas porque la ventana se quedó un poquito abierta, y rezando porque mi coche esté sano y salvo mañana a la luz del sol.

eL SiNFuLJaMeS

mayo 29, 2008

¿Y si sí?

En los últimos días he estado escuchando todo tipo de noticias relacionadas con la "crisis alimentaria mundial".

Primero la noticia: hay una crisis en la producción de granos y cereales a nivel mundial por lo que la escacez amenaza a la raza humana, ya que al parecer en el corto y mediano plazos la producción global no podrá cubrir la demanda. Esto provocará una alza indiscriminada de precios o un radical cambio en la dieta de millones y millones de seres humanos. Y es que los cereales conforman cerca del 60% de la dieta del ser humano promedio a nivel mundial.

En un principio se habló de que la crisis sólo afectaría al arroz, por lo que se preveía que los principales afectados serían los países asiáticos -quienes son los principales consumidores de este grano- sin embargo hoy se añade a la lista el maíz, que aunque aún no tiene los problemas que ya enfrenta el arroz actualmente, puede provocar un efecto muy nocivo en México, Centro y Suramérica.

No puedo dejar de comentar el intento de "heroica" intervención del gobierno mexicano anunciando con bombo y platillo el programa nacional de apoyo a la población durante la crisis alimentaria con el eterno cancer de este país: los subsidios.

Pues si, resulta que para que los mexicanos que menos tienen no la pasen mal, el gobierno federal ejercerá un subsidio dirigido al precio de los alimentos en crisis para que el bolsillo de los habitantes de este país no sufra una afectación mayor, aunque esto provoque problemas más serios en el futuro. Y es que las noticias más alentadoras hablan de una crisis de dos años de duración con lo que se daría al traste con la economía nacional de mantener un precio fijo mediante el subsidio de los alimentos enriqueciendo a unos cuantos productores y vendedores con el dinero de todos.

Y después de las noticias no puedo dejar de comentar las hipótesis de la crisis... y cabe aclarar que pueden aplicar varias al mismo tiempo puesto que no necesariamente son mutuamente excluyentes.

1. El subsidio del gobierno de EEUU para la producción de maíz para la elaboración de etanol. Este supuesto "green fuel" que tan de moda se está poniendo resulta que está siendo impuslado por el gobierno de Jorgito Bush por lo que cada vez más productores de maíz en nuestro vecino país del norte se dedica a producir maíz como materia prima para el combustible. Como nota adicional solamente comento un hecho: según los expertos, el producir etanol sale más caro que venderlo, por lo que aparentemente el único beneficio es el ecológico. ¿Será?

2. El aumento en la capacidad de compra de las naciones emergentes asiáticas. Principalmente China e India, que últimamente han visto incrementado su poder adquisitivo a nivel poblacional, lo que puede indicar un cambio en los patrones de consumo de la población de ambos países. ¿Qué quieren decir entonces que los chinos y los indios ahora comen más arroz porque pueden pagarlo? ¿No será que de todos modos son un chingo de chinos e indios y que a todos los tienen que alimentar? Digo, no por nada son las dos naciones con más alta población del mundo. Yo recomendaría que se coman los unos a los otros, pero creo que eso no es de buen cristiano.

3. Mi personal y favorita: La crisis alimentaria puede provocar el consumo obligado de granos y cereales transgénicos ante la falta de alimento a nivel mundial. Para mí no es complicado imaginar a un gringo gordo extremadamente rico que vive en Kentucky y cuya producción de granos y cereales es 100% transgénica. A pesar de que decidió desde hace años apoyar con todo esta tecnología, no ha recibido su recompensa puesto que algunos retractores continúan diciendo que consumir este tipo de comida produce efectos secundarios. Por eso convenció a algunos de sus amigos en todo el mundo para provocar esta crisis y después repartirse las ganancias dejando millones de chinos, indios, africanos y latinoamericanos afectados seriamente y sin posibilidad de evitarlo. No suena tan descabellado ¿o si?

4. Un compló tipo "Wag the dog" en el que se genera una sicosis mundial por una supuesta crisis alimentaria que da a ganar millones de dólares a productores y especuladores cuando todo se trata de una farsa, de un efecto provocado, como ha pasado miles de veces en los mercados bursátiles mundiales aunque esta vez, a una escala global. Suena descabellada y complicada, mas no imposible. Sobre todo si se tiene control sobre el cuarto poder.

Querido lector, escoge la que más te gusta y platícame qué opinas. En una de esas la cloaca se destapa y nos enteramos de todas las chapucerías. Aunque también existe la posibilidad de que nunca lo sepamos hasta que nuestros nietos nazcan con tres ojos por efectos secundarios del consumo de alimentos genéticamente modificados.

Y que quede claro que yo no estoy ni a favor ni en contra de estos alimentos hasta este momento por lo que no es algo personal.

En fin, si alguien tiene más teorías que añadir a la lista, bienvenidas.

SiNfuLJaMeS

mayo 23, 2008

Me quedé frío

Hoy que llegué a la casa de ustedes me recibió mi mamá con la noticia de que según su socia el presidente Felipe Calderón había sufrido un atentado. Me dijo que había salido con una herida de bala en el hombro y que todos los presuntos agresores habían resultado muertos.

Me quedé frío.

No les puedo mentir, la verdad es que en las elecciones federales del 2006 voté por Calderón. No me considero panista y no admiro a FCH, sin embargo no soporto al peje y creo que si la izquierda mexicana se reduce al PRD estamos jodidos. Pero eso no implica que no pueda entrar en pánico con una noticia como esa.

Pero bueno, les decía que no es la simpatía que me genere o no Felipe Calederón Hinojosa como ser humano sino el hecho de atacar la institución que representa: osea el poder ejecutivo. Y es que ese hecho me recordó inmediatamente el sentimiento que me generó la tarde noche del 23 de marzo de 1993 con el cobarde asesinato de Colosio o la mañana del 1 de enero de 1994 cuando nos despertamos con la noticia de que había un grupo guerrillero en los Altos de Chiapas, México. A la fecha me cuesta trabajo asimilarlo ya sea porque siento que los atentados y la guerra siempre han estado en mi baúl de juguetes, en las noticias del medio oriente y europa oriental o en las películas de guerra, sin embargo el hecho es que me dejó en shock. También siempre pensé que eso no podría seguir en México y cuán equivocado estaba.

Mil ideas pasaron por mi mente mientras buscaba desesperadamente un noticiero en la televisión en dónde poder saber más. Por supuesto no lo encontré puesto que CNN Internacional estaba con su media hora de deportes, CNN en español tenía a Aristegui y en los locales faltaban 18 minutos para que empezaran los noticieros. Fueron 18 angustiosos minutos en los que salté de canal en canal hasta que López Dóriga me tranquilizó con su característico y amarillista tono leyendo los encabezados de hoy sin que ninguno hablara del supuesto atentado.

Ya más tranquilo recordé lo que había sido mi vida como mexicano hasta ese momento y me puse a recapacitar en ese hecho. En realidad hemos vivido muchas fregaderas en este país: desde las crisis sexenales acumuladas desde Echeverría, la nacionalización de la banca por López Portillo, el temblor del 85 (y la consiguiente incapacidad del gobierno para actuar adecuadamente), el fraude electoral del 88, el asesinato de Colosio, el error de diciembre del 94, la victoria de Fox y la posterior decepción cuando se convirtió en presidente, la derrota de AMLO y su berrinche en Reforma, e incluso más recientemente la toma de las tribunas en ambas cámaras por supuestos legisladores elegidos por nosotros. Y con todo y todo el país sobrevive.

Hay un chingo de muertos acumulados en lo que va del año en diversas entidades del país, hay ejecuciones contra mandos policiacos y no policiacos en todos los niveles, hay decomisos millonarios, hay atentados. Y a pesar de todo el país sobrevive.

Pero ¿qué pasaría si matan al presidente de México? Eso sí está muy cañón. Y es en dónde quiero dejar mi reflexión: más allá del hecho de que hayas votado o no en el 2006, más allá de que hayas votado por FCH, por el Peje, por Patricia o por tí mismo, si matan al presidente, ¿qué sigue?

Me queda claro que hay dos personas a las que difícilmente veríamos secuestrados y/o muertos en un atentado en este país: Carlos Slim y el presidente en turno; así que si el atentado es contra de uno de ellos querría decir que estamos más metidos en la mierda de lo que pensábamos. Que los cárteles ya no solo controlan el paso de la droga por nuestro país sino muchas cosas más. Y querría decir también que los simples mortales como tú y como yo podríamos morir mañana sin el menor esfuerzo y sin que nadie pueda hacer nada al respecto.

Pero bueno, al final pude descansar tranquilo viendo que todo era una alucinación de la socia de mi mamá y que nada de lo que me había dicho era cierto. No obstante la reflexión creo que vale la pena. ¿Tú qué harías si matan al presidente de la república?

SiNfuLJaMeS

mayo 18, 2008

Siendo uno con el universo

¿Alguna vez han tenido la certeza de saber porqué están aquí? ¿Alguna vez han sentido que todo tiene coherencia y que el mundo tiene una razón de ser?

A mí me ha pasado. Antes, cuando transitaba por la vida sin un sentimiento de consciencia, estas dudas me asaltaban a cada rato. Eran aquellos lejanos días en los que repetía que yo era "ateo, gracias a Dios", en los que me gustaba que la gente pensara que era satánico y drogadicto por usar el pelo lagro y escuchar heavy metal con velas e incienso, en los que era divertido ver la cara de los demás cuando decía que era ateo aunque nunca fuera delante de mis padres y con la plena consciencia de saber qué es eso.

Sin embargo poco a poco he ido madurando. He ido aprendiendo. He ido conociendo. He ido recordando. Y el reiki, junto con lo que he vivido, me ha ayudado en mi proceso. Hoy siento que soy uno con el universo y con cada uno de los seres que lo conformamos.

Hoy soy consciente de que si lo quiero, lo consigo. Que si lo deseo, sucede. Que si lo planeo, pasa exactamente lo que quiero que pase. Ahora el truco está en quererlo juntos. En desearlo juntos. En planearlo juntos. Se puede. Estoy convencido y para mí es suficiente. Ahora sólo es cuestión de empezar.

Hoy puede ser un gran día, si tú estás convencido de que así es. Y no tiene que ver con que seas otimista, tengas al menos un perro que te ladre o te hayas sacado la lotería. Al final no se trata de lo que te sucede, sino de cómo reaccionas ante lo que te sucede.

Te espero. La cita no es conmigo sino contigo. Y el futuro no es mío o tuyo, es nuestro... si tú quieres.

SiNfuLJaMeS

mayo 14, 2008

Hace más de un mes

Hace más de un mes que no posteo. La verdad es que sí lo extraño, no puedo negarlo. Y lo peor de todo es que no tengo una maldita razón válida.

Si bien es cierto que mi vida en este momento, por lo menos en el aspecto laboral, está estancada irremediablemente por la actitud mesiánica y ridícula de un personaje con delirios de grandeza que lo único que hace es joder, aprovechando que es intocable por lazos familiares con el otrora directo - ahora vicepresidente- de la marca pues... no es pretexto.

Sinceramente siento mucha frustración a diario y lo peor es que ya no tengo motivación alguna para llegar a la oficina. Ya ni hablamos de dar mi máximo por mi empresa, por mi equipo y/o por mi jefe. Y créanme cuando les digo que yo solía tener la camiseta puesta incluso antes de saber que trabajaría ahí, pero así pasa: hoy la camiseta está olvidada en la lavandería, ya no me queda y no tengo intenciones de recuperarla. Y eso está cabrón.

Por lo pronto estoy buscando nuevos horizontes. Nuevos retos que contemplen a un mercadólogo con experiencia en investigación de mercados y publicidad que le encantaría poder hacer algo de planeación estratégica. (Chale con el autogol, pero para que vean mi grado de desesperación).

En fin, no quiero hacer falsas promesas diciendo que desde mañana regreso a las andadas y con ánimos de postear diario. Las ganas habitan en algún lugar de mi cerebro, el problema es que la apatía no las deja salir a la superficie. Lo que sí es un hecho es que pronto romperé este círculo vicioso porque he tenido momentos reveladores al respecto: cocinar... actuar... besar... manejar... y eso que no he pintado aún.

Bueno, sin más: un abrazo grande y crucen los dedos para que Chivas haga el milagro, porque después de ese fiasco de partido necesitarán más suerte que el América en el Maracaná. Y lo peor es que los equipos que se encierran en el Jalisco generalmente sacan los resultados así que estoy temiendo la continuidad de la maldición del superlíder. Ya ni pedo, ojalá por lo menos el técnico de la selección resulte mejor que el anterior, aunque con esos antecedentes cualquiera lo supera.

Saludos,

El SiNfuLJaMeS en CRISIS

marzo 26, 2008

¿La cultura para todos?



Hoy tuve la fortuna de ir a ver la exposición Ashes and snow, de Gregory Colbert, en el zócalo de la Ciudad de México.

Debo comenzar diciendo que en realidad es un "must" y que no se arrepentirán de asistir puesto que en realidad el autor plasma imágenes increíbles que merecen mucho la pena ver tanto en fotografías como en video. Además, la exposición se acompaña de un soundtrack que es una pieza exquisita con artistas de la talla de Lisa Gerrard (Dead Can Dance) y Michael Brook.


Sin embargo, y he aquí el gran pero, la verdad es que no lo disfruté como esperaba. Para empezar, las fotografías están impresas en gran formato, lo que implica que no se ven bien de cerca pero se ven muy bien a cierta distancia, sin embargo las características del emplazamiento no permiten ver las imágenes en todo su esplendor ya que están colocadas a lo largo de dos corredores no tan anchos y de manera paralela por parejas.


Si a esto le añadimos que la entrada es gratuita y que la exposición está montada en plena plancha del zócalo y que esta semana es de vacaciones para muchos (como yo), pues resulta ser un verdadero calvario. Pero les cuento mis aventuras con más detalle.


Me fui al DF en camión para evitar las broncas de estacionamiento y el manejo de regreso con el cansancio que se acumulara, lo que realmente resultó ser una excelente idea. Traslado en el Sistema de Transporte Colectivo Metropolitano, mejor conocido como el Metro, hasta el zócalo aunque me bajé en Pino Suárez y caminé tres cuadras para llegar y rodear por completo el lugar por la falta de señalamientos respecto a la ubicación del comienzo de la fila.


Finalmente empecé a hacer la fila y continué haciéndolo durante los siguientes 48 minutos aunque en un esquema tipo Disneylandia en el que te ponen incluso banquitas para que descanses por lo que no se te hace tan pesado. Incluso justo antes de pasar finalmente me marcaron el alto a dos personas de pasar por lo que en vez de ser de los últimos del pelotón, fui de los primeros del siguiente.


Ahí es donde empezó el desmadre: demasiada gente entrando al mismo tiempo. No te podías detener el tiempo que te hubiera gustado para admirar las fotografías del lado que te tocaba y si intentabas mirar al otro lado, con el río de personas pasando delante de tí era imposible tener un momento tranquilo para ver la imagen completa. Al final del pasillo un video siendo visto por mucha más gente con unos amables edecanes que te pedían constantemente que te hicieras lo más adelante posible. Y eso que no cuento a la pareja de atrás de mí que se la pasó discutiendo todo el primer video que si era un orangután o un chimpancé, como si eso fuera lo trascendiente de todo.


Total, al final decidí no quedarme a ver los videos porque la mamá de una amiga compró el DVD y la verdad me estaba engentando rápidamente por lo que mi limité a recorrer el tercer y último pasillo de fotografías con la calma que pude conseguir para finalmente salir a la tienda y gastar mi dinerito en souvenires.


Como conclusión me aventuro a decir lo siguiente:


  1. Increíble que sabiendo de antemano las características de su material no hayan sido capaces de encontrar una mejor distribución de las fotografías para que por lo menos no tuvieras que "perderte" de admirar las del extremo contrario.


  2. Gandalla el hecho de que no te cobren la entrada pero te quieran vender el libro de las fotografías en $5,000.00 pesos y los posters en $200.00 (y te los dan enrollados dentro de una bolsa con el riesgo de aplastarlos fácilmente.


  3. Ridículo que por dejar la entrada libre el lugar se haya abarrotado de gente sin que los organizadores hayan hecho algo al respecto puesto que al final no se puede disfrutar de la misma manera. Digo, me da gusto que la cultura esté al alcance de todos, pero no me gusta cuando por eso no puedes admirar lo que vas a ver y además compartes el pasillo con los chavos que se fueron de pinta de la secundaria, las monjas que llevan a los viejitos cascarrabias del asilo, el papá que lleva a la familia completa y ni siquiera sabe qué animales están siendo retratados pero de igual manera contesta a las preguntas de sus hijos y el individuo que lleva la bolsa entera de pan Bimbo llena de sandwiches de jamón que se va comiendo a lo largo de la exposición.


  4. Insatisfecho me deja el hecho de que al final me quede dudando de si las fotografías y videos son composiciones realizadas en postproducción o son imágenes sin trucos, puesto que en ningún lugar te dicen el cómo lo hizo.


Sin embargo al final creo que valió la pena por el mensaje de todo el proyecto que está más allá de la experiencia en si. Además el nivel de producción definitivamente hace que todo te cause una tremenda y, en mi caso, muy positiva impresión pese a los errores.



En fin, ojalá podamos contar con más ejemplos de este tipo en el futuro aunque idealmente poder tener una exposición con este nivel de organización, apoyo y recursos pero de artistas mexicanos con proyectos nacionales.



Por lo pronto, si pueden, no se la pierdan y si de plano no pueden ir, por lo menos visiten su página: http://www.ashesandsnow.org/es/exhibition/nomadic-museum.php



SiNfuLJaMeS

marzo 21, 2008

Cockteles varios

Como hace mucho que no posteo (¿qué tal con mi verbo nuevo? yo posteo, tu posteas, él postea, etc.), y tengo varias cosas que decir, decidí hacer un combinado de varios sabores a ver qué sale...

Internet's Adiction

Empecemos por el principio. Una amiga me diagnosticó con este mal de la sociedad moderna y la verdad es que creo que tiene razón. No lo hemos definido muy a fondo pero en mi caso los síntomas fueron los siguientes:
1. Ansiedad
2. Irritabilidad
3. Síndrome de desatención

Y la lista podría seguir, pero tampoco es el caso. Lo que sí es el caso es comentar que todo se derivó de dos acciones aisladas que me afectaron directamente. La primera fue que en la oficina terminaron por determinar que el leer (y escribir blogs), forma parte de la "socialización cibernética" y por lo tanto de unos meses para acá está restringido el acceso; aún a pesar de que soy de los pocos que tengo permisos especiales para visitar sitios como el Hi5 ya que nos hemos anunciado ahí.

La segunda es porque hace tres semanas mi vecina fue despojada del router que tenía prestado y por lo tanto mi papá y yo nos quedamos sin acceso a internet. Que ya entrando en confianza comentaré que se trataba de una conexión a internet con una calidad de señal punto menos que inexistente y que dependiendo del contentillo del router, del humor de la hija de la vecina o de que alguien estuviera utilizando un teléfono inalámbrico o celular cerca era de una rayita o ninguna. Realmente frustrante ahora que lo recuerdo.

Por suerte mi papá accedió a contratar el servicio directo y aunque mi apuesta era que tendría acceso a internet a partir del próximo lunes, desde el miércoles pasado he visto disminuir mis síntomas al mínimo y puedo checar mi cuenta de correo para verificar que nadie ha escrito cada 30 segundos sin preocuparme más por la señal.

Hugo Sánchez

Ya bien reza el refrán que el pez por su boca muere. Yo sé que había prometido no hablar de futbol en este blog pero debido al rotundo fracaso de mi blog futbolero (que por cierto aún no me atrevo a borrar definitivamente), me desquito aquí.

Ya he despotricado contra ese que se dice director técnico nacional y no repetiré lo que ya me han escuchado decir. Me limitaré a enviarle un mensaje al macho: Si tienes un poquito de dignidad (lo cual dudo puesto que después de tu cobardía en el mundial del '94 regresaste de España para jugar con el Celaya, el América y el Atlante), renuncia antes de hacer más daño.

Hueva crónica

Aún en la prepa, una gran amiga me dijo un día sin siquiera agua va, que yo sufría de "hueva existencial". Por supuesto le creí en el instante e incluso estuve de acuerdo con ella sin saber que con eso no hacía más que prolongar el padecimiento. Según ella, la hueva existencial la evidenciaba con mi manera de caminar, como si trajera el mundo a cuestas y eso me pesara de verdad. Yo por supuesto sólo atiné a decir: "Ay, qué hueva".

Años más tarde, en la universidad, mis homemates y yo llegamos a la conclusión de que los sillones de la sala de la casa en Querétaro (Rosalba, para los que se acuerden, aunque ya no sea rosa), estaban infectados con húevola. Esta rara enfermedad atacaba a todo aquel que se sentara un momento en ellos, especialmente entre las dos y las cuatro de la tarde de cualquier día entre semana y provocaba unas incontenibles ganas de dormir.

Fue hasta después de mucho razonarlo que me di cuenta de que ambos eventos, al parecer aislados, eran en realidad consecutivos pues solamente una persona que padece de hueva existencial puede ocasionar una epidemia de huévola en unos apacibles e inofensivos -en apariencia- sillones de una sala.

Lo interesante de todo esto es que veo que la terrible enfermedad de la hueva existencial, ha provocado en mí oleadas de hueva crónica que se manifiestan durante los fines de semana y los periodos vacacionales en los que por falta de dinero decido quedarme en casa. Esto me ha sucedido en los últimos días en los que al principio, a pesar de haber tenido muchos planes, se han quedado en eso puesto que a la hora de querer ponerme a trabajar, con sólo pensarlo la hueva me invade y me tumbo derrotado en la cama a leer o escuchar música y si el ataque es muy fuerte termino en el sillón idiotizado con la televisión.

Si alguien de ustedes conoce algún remedio para esto por favor pásemelo, por más doloroso que pueda parecer. Digo, la verdad es que ya me siento mejor: prueba de ello es que estoy escribiendo mi blog, que por huevón no había actualizado en un rato; pero no quiero lanzar campanas al vuelo y prefiero sincerarme con ustedes para ver si conocen la solución.

En fin, pueden dejar sus sugerencias en los comentarios. Y sólo me resta decir que afortunadamente es viernes, aunque sea santo.

SiNfuLJaMeS

marzo 01, 2008

Hoy fui a ver Juno


Lei la sinopsis y quise ir a verla. Al principio estaba dubitativo porque, al igual que una amiga, pensé que iba a ser otra "girly movie" de esas que son odiosas porque o son feministas o desbordan miel de la pantalla con un galán que hace suspirar a varias.


Sin embargo su escritora ganó el oscar al mejor guión original y eso me animó mucho. Después leí acerca del libro que editó Diablo Cody de cómo vivió un año como stripper nada más por vivir la experiencia y después escribir el libro y me convenció de su originalidad.


Ya hablando de la película y sin el afán de hacer una crítica y calificarla con cinco estrellitas me limitaré a decir que me sentí identificado con uno de los personajes (tendrán que verla para saber cuál), y eso estuvo muy cabrón.


La trama está cagada (sí, esa es la mejor palabra para describirla), y en realidad creo que el guión está muy bien hecho. El final me pareció innecesario y hasta demasiado hollywoodense pero bueno, después de todo también se vale, y la rola lo justifica. Las actuaciones son muy buenas, Ellen Page definitivamente está muy cañona (sí le crees que tiene 16), y la misma Jennifer Garner a la que me costaba trabajo ver fuera de su papel de Elektra lo hace muy bien.


Pero bueno, en realidad creo que lo que más me impactó fue verme reflejado de una manera tan perfecta en un personaje. Así me siento en este momento y no lo puedo evitar. Me entristece lo que ocasiona esto a mi alrededor, aunque por otro lado también me libera y me hace sentir muy bien conmigo mismo.


Un gran amigo me dijo hace poco que en realidad la vida se trata de buscar la felicidad. Hay pocos que se atreven realmente a hacerlo por las consecuencias que esto trae y ahora lo entiendo perfectamente. También entiendo ahora su filosofía de vida y en estos momentos la abrazo como mía también.


Los demás seguramente estarán juzgando, sin bases y desde afuera como casi siempre, pero no me importa. Todos tenemos derecho a ser felices, aunque en el camino hagamos infelices a otros buscando nuestra propia felicidad. Eso es lo que es duro, pero así es la vida.


En fin, gracias Diablo Cody por dejarme reflexionando tanto y gracias a Jason Reitman por retratarme tan bien en una película que es todo menos una girly movie.


Vayan a verla y si alguno de ustedes está en una "mid-life crisis" o tiene una crisis de pareja tengan cuidado con las identificaciones.


SiNfuLJaMeS

febrero 11, 2008

¿Cómo sobreviví mi primer día en un hospital?

Bueno, no hay que ser tan dramáticos. La verdad es que sólo pasé algunas horas pero se me hicieron eternas. Pero bueno, empecemos con el principio...

Resulta que hace unos días comencé a sentir mi estómago extraño. Comenzó con ciertos dolorcitos espaciados que no llamaron mi atención hasta que el domingo, después de la peda de Cheque, me sentí realmente mal. Claro, asumí que estaba crudo y me valió madres. Todavía el lunes por la noche fui al teatro y antes de entrar me comí un delicioso helado natrual de mango (de la Michoacana), y empecé con molestias más fuertes sin razón aparente.

Sin entrar en detalles diré que detecté que estaba obrando de color oscuro y eso siginificaba presencia de sangre. Como siempre, traté de minimizar el hecho pensando que era algo aislado y que no ofrecía mayor peligro. Por las noches me daba reiki pensando en resolver el problema sin notar que había más cosas detrás.

Sin embargo el pasado viernes me levanté como siempre, me desayuné mi sandwich de jamón con queso y, a medio día me tomé una Coca-Cola. Esta rutina la he repetido muchos días de oficina sin mayores contratiempos pero ese día no fue igual. Al rededor de la una de la tarde me empecé a sentir realmente mal del estómago y terminé por ir al baño a devolver la coca que me había tomado.

Saliendo del baño me sentí un poco mejor. Recalco el un poco. Llegué a mi lugar y empecé a sudar como preparatoriano antes de un extraordinario que condiciona su asistencia a la peda de graduación (osea un chingo). Me salí un momento a tomar aire y me sentí mejor. Tenía una maratónica junta de 4 a 7 de la tarde (si, en viernes, no tienen madre), con DDB y mi jefe se había ido a comer con Daniel y Pedro (el CEO de Mediacom, la agencia de medios), por lo que tenía que esperar a que regresara para poderle perdir permiso de irme a mi casa debido a mi malestar.

Total que para cuando regresé a mi lugar sentí unas incontenibles ganas de ir al baño y fui. Cuando me estaba preparando para salir del baño me empecé a sentir muy mareado, al grado que tuve que sentarme apenas saliendo esperando que alguien conocido me echara una mano pero no pasó nadie. Después de tranquilizarme un poco me regresé a mi lugar todavía un poco mareado y tan pronto me vió Belén me alcanzó en el pasillo para llevarme a mi lugar diciéndome que estaba transparente.

Belén muy atenta me puso alcohol y se propuso llevarme al servicio médico en planta. Yo siempre he desconfiado de los médicos (con contadas excepciones, aunque ese es tema para otra entrada sin problemas), pero ese día sentí que TENÍA que ir. Total que me llevó a Urgencias de Cubo 3.

Cómo me vería el doctor que cuando me estaba preguntando que si tenía consulta me vió y me dijo "pásale por acá", y pasamos directito a las camas. No piensen mal, sólo me oscultó con ropa y todo.

Me hizo el chequeo de rigor: presión arterial, temperatura y las preguntas clásicas que empiezan con el "¿Qué le pasó?", aunque por un momento me sorprendió con un: "¿es usted diabético?". La verdad es que no lo sé, pero esperaba que no, sin embargo como me vio dubitativo pidió que me hicieran una medición de azúcar y ese fue el primer piquete. Total, su consejo fue que me quedara un rato ahí porque aunque me veía muy débil y ya después veíamos qué haríamos conmigo.

Después de algunos minutos en los que aproveché para hacer algunas llamadas desde la cama, el doctor vino por mí para llevarme a su consultorio. Tan pronto entré me dieron ganas de volver el estómago de vuelta y cuando lo hice (en el baño, no crean), sí me espanté. Resultó que vomité sangre de color negro por lo que cuando salí del baño el doctor me esperaba con una jeringa preparada, lo que se convirtió en mi piquete número dos.

Al ver que había vuelto el estómago por segunda vez sin haber comido nada el doctor me informó que había solicitado un análisis de sangre más profundo, que me había inyectado una solución para evitar más naúseas y vueltas de estómago y me dio una cápsula para recubrir el estómago. También me comentó que iba a pedirle a Belén que se marchara porque me iba a tener que quedar un poco más de tiempo.

Total, en ese ínter me vinieron a sacar sangre, lo que se convirtió en el piquete número tres del día y me mantuvieron en reposo otro rato ahí. Cuando finalmente vino el doctor por mí ya tenía los resultados del análisis de sangre, aunque no tengo idea de cuánto tiempo pasó. Me llevó de nuevo al consultorio y me estaba contando algo de leucocitos cuando perdí el conocimiento. Cuando volví en mí estaba rodeado de doctores y estaban pidiendo una ambulancia. Ahí me informaron que me iban a llevar al hospital y que estaría por lo menos un día en observación. Me preguntó el doctor cuando estaban ajustando las correas de la camilla, si tenía algún seguro o se mi llevaban a San Alejandro, al hospital del Seguro Social. Fue ahí cuando me menté la madre por no haber comprado mi seguro de gastos médicos mayores.

Recuerdo perfectamente el traslado: estuve consciente todo el tiempo hablando incluso con el camillero. Fue incluso durante el traslado que le hablé a mi papá para decirle que me llevaban al hospital, aunque en ese momento no quería que fuera porque pensé que iba a llegar y me iban a dar de alta. Ja! ¿Así o más iluso?

Cuando finalmente llegamos al hospital me dieron ingreso, me pidieron que me pasara a la camilla del hospital y me ubicaron en el cubículo número 5, aunque tenía un papel encima con el número 10 (osea que en donde cabe uno, caben dos, básicamente), junto a un chavo que tenía una hernia inguinal y que tenían con suero, aunque su intervención estaba programada para el otro día. En el inter llegó mi papá lo cual me tranquilizó al instante y afortunadamente me llevó una botella de agua porque estaba sediento al extremo.

Me oscultó un médico del hospital que me hizo las mismas preguntas del anterior con una variante: me cuestionó acerca de cuál era la clínica del seguro que me correspondía. Cuando le contesté que Cholula me empezó a regañar que entonces por qué había ido a San Alejandro. Se calmó cuando le dije que había perdido el conocimiento y que me llevaron en ambulancia, aunque cuando se fue no lo noté muy convencido. Cuando se fue el doctor dieron de alta a mi compañero así que me quedé solo en ese cubículo.

Entonces llegaron las únicas personas amables del hospital: las enfermeras. Un par me colocaron los instrumentos para hacerme un electrocardiograma porque mi ritmo cardiaco estaba un poco errático, decían. Nos divertimos un rato cuando trataron de colocar los chupones en mi velludo pecho, aunque al final lo consiguieron sin necesidad de rasurarme. Les dije que alguien muy especial se los iba a agradecer y se rieron bastante.

Después llegó otro par de enfermeras a colocarme el suero y a sacarme una muestra de sangre. Ellas sí me rasuraron el brazo para poder colocar la aguja pero sobre todo, me comentaron, para evitar que al momento de retirarla me depilaran y el dolor fuera mayúsculo. Les pedí que fuera en el brazo izquierdo puesto que el derecho era el que ocupaba para escribir y pintar y me dijeron que con la condición de que les llevara un dibujo. Me siento culpable por eso porque obviamente no lo haré, pero en ese momento les dije que sí.

Cuando ya tenía el suero colocado me movieron al cubículo 31, aunque en realidad había sido el 16 originalmente. Era un cubículo que estaba en esquina y para que se den una idea, tuvieron que mover las dos camillas de los cubículos que estaban al lado del mío para que pudiera entrar la mía. Obviamente una vez adentro no había mucho espacio de maniobra por lo que creo que es prácticamente imposible que ahí pongan a dos personas, aunque de cualquier manera estaban colocados con papel blanco y el número pintado con plumón los letreros de 30 y 31.

Cuando llegué a "mi" cubículo ya eran las 6:30 y se suponía que a las 7 se terminaba la hora de visita así que esa media hora se me pasó como agua. Al principio me quería hacer el valiente y le dije a mi papá que se fuera, pero cuando se acercaba la hora de salida me empezó a entrar el pánico. Al final puse mi mejor cara y le dije a mi papá que nos veíamos a las 11, en la siguiente hora de visita.

Tan pronto se fue quise entretenerme hablando por teléfono (sí: me dejaron mis dos celulares que aunque me fueron de mucha ayuda, no entiendo aún cómo lo permiten), pero fue peor. Las llamadas que hice me pusieron un poco más intranquilo y cuando colgué me entró un ataque de claustrofobia: sudaba copiosamente y estoy seguro de haber tenido fiebre porque estaba pensando cada locura que no saben.

Media hora más tarde pasaron a avisar que se había acabado la hora de visita y finalmente el lugar se tranquilizó. Fue entonces cuando pude dormir un poco pero a ratos y con sueños super locos.

Para no extenderme más les diré que como a las 10:30 pasó la doctora a decirme qué pasaba conmigo y qué podríamos hacer. Lo que me dijo es que tenía una úlcera aunque no sabía dónde y la úlcera me había ocasionado una anemia por la pérdida de sangre, y que para saber en dónde estaba localizada y qué tan grande estaba era necesario hacerme una endoscopía. También me comentó que el aparato no estaba disponible sábados y domingos por lo que tendría que quedarme en el hospital hasta que el lunes me pudieran hacer el estudio. Y cuando le pregunté si me podrían subir a los cuartos me comentó que había 30 personas antes que yo, por lo que no era probable que me pudieran subir (recuerden que estaba en urgencias todavía).


Después le pregunté que si me podía retirar y regresar el lunes, pero me dijo que no me podía asegurar que tuviera lugar el lunes puesto que no entraría por urgencias. Total que sí podía darme de alta voluntaria puesto que no me veía tan mal, pero que no me lo recomendaba y de todos modos eso lo tendría que decidir a las once de la noche, después de que terminara la ronda.

Cuando llegó mi papá y después de sopesar las opciones con él decidí que me iba a dar de alta voluntaria y buscar una opción privada el sábado para hacerme el estudio.

Y cuando pensé que el martirio había terminado me di cuenta que no. El calvario para salir nos llevó más de una hora en la que mi papá tuvo que ir con la trabajadora social que le hizo firmar unos documentos que absuelven al hospital de cualquier responsabilidad, me visitó un doctor para advertirme que si me iba no me podrían dar incapacidad y todavía tuvieron el descaro de decirme que si me quedaba ya tendría cuarto y podría estar más cómodo.

Al final permanecí firme en mi decisión, les agradecí todas las atenciones y me retiré. Y como dato adicional les cuento que el lunes me hice la endoscopía y resulta que tengo una úlcera en el duodeno (el inicio del intestino delgado), además de una colonia de bacterias en el estómago. Estoy en tratamiento medicinal y creo que ahí la llevo, pero por lo pronto sobreviví a mi primer día en un hospital y ya no de visita.

SiNfuLJaMeS

enero 18, 2008

Hoy en mi cumpleaños

“Hoy en mi cumpleaños, pensé conseguirme media tonelada de flores, siete miradas distintas, quinientos besos de sabores, un collar de perlas amarillas, dos boletos para el cine y un disco de los Rolling…” Así me cantaría yo la canción de Delgadillo pero creo que no. Además me da hueva. No la canción, ni Delgadillo, sino conseguirme todo eso para mí.

Hoy es mi cumpleaños. Me sentí muy chido porque recibí una llamada telefónica (a las dos de la mañana), para felicitarme. Agradezco a esa persona el gesto porque me hizo consciente, en ese preciso instante, de que en realidad es mi cumpleaños la oportunidad estupenda para sentirme bien conmigo y celebrarme, independientemente de lo que los demás hagan o dejen de hacer.

Con esto en mente me levanté a las siete de la mañana y me tomé mi baño. El baño de la mañana es un momento importante para mí porque ahí hablo conmigo y reflexiono, aunque en invierno resulta un poco más complicado porque el frío no permite estar mucho tiempo ahí. De todos modos lo aproveché y fue la ocasión perfecta para confirmar celebrarme a mí mismo mi cumpleaños.

Afortunadamente es viernes y eso implica que puedo ir a la oficina sin corbata, lo que resulta para mí un excelente regalo. Eso también me permite disfrazarme de persona normal y vestirme de jeans y tenis aunque esté en la oficina (cosa de que lunes a jueves es impensable), por lo que hoy traté de estrenar lo más posible así que me puse unos jeans “semi” nuevos que me compré en diciembre y ropa interior nuevecita.

Cuando llegué a mi auto decidí que hoy no iba a escuchar los noticieros de camino al trabajo y me celebré por primera vez cantando junto con el cuarteto de Liverpool “Birthday” para mi mismo. Es curioso porque la letra de la canción dice: “They say it’s your birthday, it’s my birthday too, yeah…” pero en realidad nunca he conocido a alguien que celebre su cumpleaños el mismo día que yo. Sólo se de Kevin Costner pero ese no cuenta, así que si saben de alguien más preséntenmelo para no sentirme único.

Recibí varias felicitaciones en la oficina, muy buenos deseos, muchos abrazos y a la hora de la comida fuimos al Sushi-Itto (lugar de mi preferencia). Muy rico por cierto. Y para la noche iremos a un bar a escuchar rock en vivo en lo que mis papás se van a la conferencia de El Secreto.

Creo que será un buen final para un gran día. Ya les contaré cómo me fue.

Saludos a todos,

SiNfuLJaMeS

enero 14, 2008

Esto es una jalada

Intenté comenzar echando un choro respecto a la ética y mi relación personal con ella pero la neta es que no: esto se debe decir directo y sin adornos.

El caso es que an días pasados DDB llegó a presentarnos unas propuestas para una nueva campaña (que por cierto están de pelos), pero antes tenían que presentarnos algo con lo que nos íbamos a "cagar", palabras literales del VP Creativo.

Comenzaron mostrándonos la publicidad de Hardsell que tuvo a bien publicar nuestro respetado rival en el mercado Toyota. En caso de que no la hayan visto todavía se trata de una publicación en prensa que muestra un lay-out completamente ajeno a ellos con situaciones en las que denotan que la persona de la foto se quedó perpleja por la oferta de Toyota. En la primera, una mujer dejó caer su paleta sobre el periódico en cuestión y en la segunda a un hombre se le derrite su helado por lo mismo.

Esto podría ser considerado un avance en la comunicación de la empresa nipona y no tendría mayor trascendencia de no ser porque se trata de un completo PLAGIO.

Resulta que, la pseudo agencia que le maneja la publicidad en hardsell a Toyota (que por cierto no es Saatchi & Saatchi), se fusiló esas ejecuciones de DDB Milán. Pero no sólo copió el concepto creativo para ejecutarlo de diferente manera (que aunque no deja de ser una especie de plagio es algo socialmente aceptado, sobre todo si la ejecución nueva supera a la anterior), sino que se trata de una copia fiel y total de los artes de DDB. Parecería como si incluso la dirección creativa la hubiera hecho la misma persona puesto que imitaron hasta los colores del entorno y, por momentos, las manchas del helado derritiéndose.

Me cuesta trabajo creer que haya gente tan ingenua que no se imagine que cuando haces algo tan descarado, nadie se va a dar cuenta. Sobre todo por creer que Milán está muy lejos y quién chingados va a ver las similitudes con algo que se publicó en Italia en noviembre del 2006 ¿o no? Pues se la pelaron compadres, en breve tendremos todas las evidencias disponibles para responder como empresas y esperemos que por lo menos rueden cabezas en esa pseudo-agencia creativa sin talento.

En fin, espero en breve poderles poner las gráficas para que se den una idea más clara de lo que digo, por lo pronto (y aquí viene el choro), no dejemos la ética de lado: es algo que nos debería acompañar siempre. Que cada quién lo analice y si le queda el saco que se lo ponga.

SiNfulJaMeS

enero 11, 2008

Pensador

Hoy que por casualidad estuve escuchando y leyendo algunas notas acerca de la muerte de Andrés Henestrosa, me sorprendió el hecho de que varios lo consideran el último pensador mexicano de su época; y fue entonces cuando me llegó la iluminación: Yo quiero ser un pensador. Me da mucho coraje haberlo decidido hasta ahora (cumplo 33 años el próximo viernes), pero me gustaría que en mi epitafio me despidieran con el honroso título de “PENSADOR”.

Ahora bien: ¿qué fregados se tiene que hacer para que la sociedad me reconozca como pensador? Porque es un hecho: todos pensamos. Algunos menos que otros, otros no pensamos lo que deberíamos y otros más desperdician esa capacidad decidiendo no hacerlo, pero de que todos estamos fisiológicamente posibilitados, eso que ni qué.

Pero ¿y entonces? ¿Cuál es la receta, en caso de que exista, para poder convertirse en un honrado pensador reconocido de nuestro país?

Citando al Universal, Andrés Henestrosa era: un “poeta, narrador, ensayista, orador e historiador”. Si hay que ser todo eso para llegar a pensador me queda mucho trecho que recorrer y no se si el tiempo.

Yo he intentado ser orador, aunque seguramente no como Henestrosa (me limito a maestro de ceremonias y quesque moderador en algunos eventos). He intentado ser ensayista, aunque no creo compararme con él, por más pulido que esté mi “estilo” a estas alturas de mi vida. Historiador siempre me ha parecido una profesión fascinante, pero no para mí. Así que no he sido más que un poeta frustrado y creo que narrador, lo que se dice narrador si he sido, aunque mis narraciones tienen más que ver con anécdotas y chistes que con algo más trascendental.

O sea que básicamente estoy jodido. A los 33 años descubro algo que quiero ser pero me doy cuenta que he navegado en la dirección incorrecta durante todo este tiempo. Que he permitido que los kilos se me suban al cuerpo, que los pelos y las arrugas me cubran la cara (literalmente), que el cabello comience a escasear en mi azotea, y todavía no he publicado nada ni me siento cercano a hacerlo.

¿Estaré más cercano entonces a volver a empezar desde el principio para hacerlo todo con un fin concreto? ¿O será cuestión entonces de vivir mi vida como siempre y que de la noche a la mañana, en un intento de cuestión mágica, me convierta en pensador?

Creo entonces que mi única esperanza es que ustedes, mis amigos, se acuerden de este sueño guajiro de su servidor, de esta petición mafufa y sí, alguno de ustedes lo considera prudente en su momento, que me pongan en mi esquela o en mi epitafio que fui un pensador. Ya me encargaré yo de tratar de disuadirlos con pequeños ejemplos diarios de que en efecto, siempre fui pensador, aunque pocos lo reconociéramos.

Ojalá ustedes y la historia sean benévolos conmigo a la hora de realizar su juicio y cumplan ese anhelo cuando me toque entregar mi equipo.

Mientras eso pasa trataré de llegar a mi meta, aunque sea a través de las publicaciones en mi blog.

SiNfuLJaMeS

enero 08, 2008

La diferencia entre rpm, minutos y GB Parte I


este se lo debía a Aura...

Hace muchos años, cuando yo me empecé a interesar en la música, la manera de escucharla se reducía a tres formas principales: la radio, el tocadiscos o el reproductor de cassettes. Y obviamente las únicas maneras que podías escuchar lo que querías eran los tocadiscos y las grabadoras.

De esos dos ahora ya sólo está disponible la opción de los cassettes, aunque cada vez se venden menos y dentro de poco será imposible conseguir un aparato que pueda reproducirlos. Todavía siento nostalgia cuando recuerdo los anuncios de artistas de antaño con la leyenda: “Disponible en LP, CD y Cassette.”.

Claro, el radio sigue estando disponible y vigente, pero las estaciones se han actualizado y ahora transmiten a partir de archivos electrónicos en formato MP3 o en el peor de los casos a partir de un disco compacto, y lo "in" son las estaciones de radio por internet, que ya poco tienen que ver con el concepto original de estaciones de radio.

La evolución de estos métodos de escuchar música han corrido en dos direcciones principales: capacidad y fidelidad. Y en ambos casos se han dado aumentos significativos de unos años para acá. Los CDs, a diferencia de los discos de vinil, permiten grabar hasta 780 MB o 78 minutos de música (lo que dura la 9° sinfonía de Beethoven), y ahora en con el formato MP3, aunque pierdes un poco de fidelidad, ganas mucho en espacio ya que puedes almacenar más canciones en menos espacio. Pero bueno, empecemos por el principio.

Recuerdo que mis papás tenían en lo que era el “estudio” del departamento en México un mueble modular de tubos que formaban estantes, y en uno de ellos estaba un flamante equipo de sonido marca Telefunken. Este equipo de sonido tenía un radio de perilla, un tornamesa para discos de vinil (de 33 y 75 rpm) y un tocacintas.

El primer disco que nos compraron a mi hermana y a mí fue el de Parchís que se llamaba así: Parchís. Era uno que tenía la portada en color negro con una foto del grupo acostados y en la que la ficha azul aún no era Frank (el pelirrojo), sino Oscar aunque los demás integrantes (Tino, Gemma, David y Yolanda), eran los originales. Algunos vecinos y yo cantábamos las canciones bailando aunque a mí nunca me gustó ser la ficha roja (y miren que podría haberlo sido puesto que era el hombre de mayor edad del grupo de amigos), así que prefería ser el dado.

A ese disco le siguieron algunos otros como el de Enrique y Ana con su “superdisco chino”, el de lanzamiento de la Banda Timbiriche (sí, la única etapa que me gustó de Timbiriche y de donde me enamoré de Sasha), y el de Yuri que le cantaba a Tohui, el oso panda nacido en el zoológico de Chapultepec. Incluso llegamos a tener uno del cuento de Pepina la Oruga cuyo vinil era de color rojo transparente, super chido. Creo que todavía podría encontrar esos discos perdidos en algún rincón en la casa de mis papás.

Algunos años más tarde, en navidad, mi tío Lalo tuvo a bien regalarme un LP con los éxitos del ‘83 en el que se incluía una canción de un grupo entonces desconocido en México llamado Quiet Riot titulada “Cum’on feel the noize” que cambiaría mi gusto musical para siempre, pero esa historia va después.

Los LP’s me traen cierta nostalgia aún, puesto que extraño todavía el característico sonido de la aguja cuando se colocaba sobre el disco y este empezaba a girar: emitía un ruidito muy especial (que ahora seguramente todos calificaríamos como de viejo, sucio y obsoleto), que ahora es imposible tener en cualquier otro formato. Los LPs tenían un tamaño que permitía escuchar entre 20 y 45 minutos de música por lado en formato análogo, lo que impedía reproducciones en estéreo y algunas otras cuestiones que en la era digital ya son un "must"; además de que en aquellos tiempos los discos, al igual que los cassettes, tenían un lado A y uno B, lo cual era super chido.

Cuando nos fuimos a vivir a Xalapa le pedí a Santa Clós mi primera radiograbadora y para mi sorpresa, me la trajo junto con tres cassettes, no recuerdo la marca pero me acuerdo que era negra con filitos en rojo y sonaba muy bien. El primero de los cassettes era uno que traía los 20 éxitos de Los Beatles (que fue mi favorito durante años), el segundo era uno de Tina Turner y el tercero el de Holiday de Madonna. Ese hecho que parecería simple de momento marcó mi vida de manera tajante porque a partir de entonces y hasta el día de hoy he destinado parte de mis recursos monetarios a la adquisición de álbumes musicales de diversas índoles.

Recuerdo muy bien cómo a los 9 años llegué a una tienda de discos en Xalapa a comprar mi primer cassette con mi dinero que fue el de Condition Critical de Quiet Riot (el ya para nada desconocido grupo), con el que inicié mi incursión en el metal gracias a la influencia de ese lejano LP que me regaló mi tío meses antes. La persona que atendía en la tienda se me quedó viendo raro pero como llevaba mi dinero en la mano me lo vendió sin chistar.

Mi colección de cassettes siguió creciendo y creciendo. Aunque no con mucha variedad de ritmos ya que me volví elitista y sólo consumía música en inglés, y de preferencia Heavy Metal o mínimo Hard Rock (aunque reconozco que llegaron a colarse cosas como Rick Astley y Stephanie, sí, la princesa de Mónaco): en pocas palabras me volví poco tolerante con la música en mi idioma sobre todo por la poca calidad de los artistas disponibles. Baste recordar que en esos momentos tipos como Franco y Emmanuel cantaban "Toda la vida" (cada uno con su versión de la misma canción) y alternaban el espacio en Videoéxitos (conducido por Gloria Calzada), con Chico-Ché, Rigo Tovar y Los Joao.

Los cassettes tenían una duración variable con un máximo de 100 minutos. Los regrabables los podías comprar con duraciones de 30’, 45’, 60’ ó 90’ aunque realmente podías regrabar cualquier cinta si le tapabas los cuadritos de la parte de abajo con un pedazo de cinta adhesiva.

Eso me abrió los ojos hacia la gran ventaja que representaba la posibilidad de poder grabar tus propios cassettes con tu música favorita incluso canción por canción; ahora podía hacer mis propias listas para que fueran escuchadas como yo quería y así llegó la gran idea: por quien yo quería. Pronto me vi grabando cassettes de música variada, de música tranquila, de música para echar desmadre y de música con mensajes para personas especiales.

Así me hice más adicto a las cintas. Sin embargo tristemente las cintas perdieron parte de su encanto con la llegada de los discos compactos porque aunque tuvieras un cassette con cinta de cromo y botón para encender el sistema Dolby, la fidelidad de un CD no se compara con la de la mejor cinta, sin embargo esa historia será para la Parte II.

Por lo pronto cerraré esta entrada diciendo que tengo el honor de haber grabado seis cintas especiales para seis mujeres especiales que han significado mucho en mi vida. Cada una tenía una selección muy especial de canciones y estuvieron acompañadas (al momento de la entrega), de una carta con instrucciones precisas para evitar que los mensajes fueran malinterpretados. Me ha dado mucho gusto enterarme que algunas de esas cintas sobreviven hasta hoy y siguen siendo especiales para esas personas.

Tristemente mi colección de cintas ahora se reduce a tres grupos de cassettes desperdigados en tres casas distintas sin la certeza de que estén todas las que deberían o las que alguna vez estuvieron. Y ni hablar de que cada cinta se encuentre dentro de la caja correcta porque esa labor titánica creo que nunca la concreté.

Nos vemos en la Parte II...

SiNfuLjAmES

enero 06, 2008

Feliz día de reyes

Hoy, 6 de enero, me desperté temprano (7:37 am considerando que es domingo), y me quedé en la cama calientito, pensando y recordando lo que estaba haciendo ese mismo día de muchos años atrás, aunque es necesaria una advertencia: si hay niños leyendo este texto les recomiendo que dejen de hacerlo.

En mi casa los Reyes Magos casi siempre nos traían ropa y los juguetes nos los traía Santa Clós, por lo que la emoción más fuerte la vivíamos el 25 de diciembre y no el 6 de enero. Sin embargo tengo varias anécdotas que me gustaría compartir con ustedes respecto al día de Reyes.

El primer recuerdo que me viene a la mente de los regalos de los Reyes Magos es que cuando llegábamos a casa de mis abuelos paternos el 6 de enero mi abuelo siempre decía: "vayan a ver si los Reyes les dejaron algo de regalo", y curiosamente nos encontrábamos con algún juguete o detalle muy padre. Uno de los que más recuerdo es un robot de cuerda que caminaba solito, estaba padrísimo.

Pero bueno, uno de los recuerdos más padres que tengo de los regalos del día de reyes fue un año en el que les pedimos que nos trajeran de aquellas estampitas que se llamaban "Scratch n' Smell" o algo por el estilo y que, como su nombre lo dice, tenías que rascar para poder oler la fragancia que traían. Los reyes nos trajeron varias planillas de estampas de los más variados olores (recuerdo unas de olor llanta, otras a zorrillo y unas más a chicle), unas para mi hermana y unas para mí, y nosotros después de verlas y presumirlas con los hijos de los vecinos, las guardamos en un álbum fotográfico para que no se gastaran. Es posible que ese álbum todavía esté guardado por ahí con las estampitas, aunque dudo mucho que sigan conservando la fragancia después de 25 años.

Otro recuerdo muy bueno que tengo de esta fecha es de aquellos años en que vivíamos todavía en México DF (yo salí de ocho años de la ciudad). Recuerdo que yo me desperté el 5 de enero en la madrugada al escuchar ruidos y cuando salí de mi cuarto no me atreví a asomarme a la sala, así que me conformé con ver las sombras proyectadas por las personas sobre la pared con las luces del árbol. Para mi sorpresa vi la silueta de una persona con corona, por lo que asumí que eran los Reyes Magos y me regresé corriendo a mi cama muerto de miedo pensando en que si me descubrían despierto igual y no dejaban los regalos.

También el primer día de reyes que pasamos en Xalapa, Veracruz, fue muy memorable. Mi hermana y yo estábamos muy nerviosos en la víspera así que decidimos dormir en el mismo cuarto (ya tenía cada quién el suyo). Estábamos echando mucho relajo sin poder dormir cuando llegó mi mamá a decirnos que si no nos dormíamos los Reyes Magos no iban a llegar. Entonces el nerviosismo se incrementó porque ahora no sólo teníamos que dormirnos pronto (cosa que no podía ocurrir por lo mismo del nerviosismo), sino que no podíamos ser descubiertos por lo que las risas tenían que ser contenidas, lo que aumentaba considerablemente el grado de dificultad. Para no hacer el cuento largo, durante la madrugada yo volví a escuchar ruidos, desperté a mi hermana y le dije pero decidimos no hacer nada por el miedo a que no nos dejaran los regalos. Pasamos una mala noche por los nervios, pero ahora que lo recordamos resulta sumamente gracioso.

Y bueno, el primer día de Reyes en Puebla fue el que mejores recuerdos me deja. Llegamos a Puebla en el 88 y yo contaba con 11 años de edad, y justo es decir que ya conocía la verdad acerca de la coneja de Pascua, el ratón de los dientes, Santa Clós y, por supuesto, los Reyes Magos. Sin embargo, en el fraccionamiento estábamos rodeados de puros niños más pequeños (mi hermana y yo éramos los más grandes), y decidimos utilizar eso en nuestro favor, sobre todo cuando nuestras vecinas Suárez Vela nos decían que en su casa los Reyes Magos le traían regalos hasta su mamá. Total que ni tardos ni perezosos decidimos juntar a toda la palomilla conformada por Majo y Mafer Suárez, Majo y Anita Camacho y Edurne Ortega en nuestra casa para escribir todos juntos nuestras cartas a los Reyes Magos. Menuda sorpresa se llevaron los papás de todas cuando en sus cartas el 5 por la noche, descubrieron que gracias a la influencia de los Garibay, todas habían solicitado que los Reyes Magos les dejaran sus cartas firmadas. Increíble broma que les jugamos ya que tuvieron que ponerse de acuerdo todos y acudir con mi papá para que todas las cartas fueran firmadas por la misma persona en caso de que comparáramos firmas al día siguiente, cosa que seguramente haríamos.

Por supuesto ese año los Reyes Magos regresaron a dejar regalos debajo del árbol en mi casa pero lo mejor de todo fue que cuando nos levantamos ese 6 de enero y salimos al patio a visitar las casas de nuestros vecinos pudimos ver que había restos de paja, alfalfa, zanahorias y cacahuates dejados por los animales de los Reyes (así como una majada de caballo, también dejada ahí). Y cuando llegamos a casa de los Camacho comimos rosca con un delicioso chocolate caliente mientras todas las niñas nos contaban qué les habían traído los Reyes Magos y, desde luego, se ponían a jugar con sus juguetes y comparar las firmas en sus cartas.

Yo por lo pronto me muero de ganas de tener hijos para poder tener la oportunidad de jugar a ser Santa Clós, Melchor, Gaspar y Baltasar así como la coneja de Pascua y el ratón de los dientes, aunque ya vendrá el tiempo para hacer eso.

Por lo pronto les deseo hoy justamente, que pasen un ¡Feliz día de Reyes! y recuerden como yo, esas especiales anécdotas de la infancia cuando recibían sus regalos del día de Reyes junto a su zapato, en caso de que se portaran bien.

SiNfuLjAmEs

enero 04, 2008

Renovarse o morir

Eso reza un dicho que últimamente me ha dado muchas vueltas por la cabeza y al parecer lo haré, más allá de querer hacerlo o no. Comienza el 2008 con cambios drásticos en mi vida que se han dado de una manera nada ortodoxa y que sin duda marcarán mi futuro, aunque todavía no se en qué sentido.



No quiero hablar de estos cambios sino de la oportunidad que me brinda la vida de renovarme y en lo único que pienso en este momento es en gritarle de vuelta: ¡A huevo que me renuevo! Si lo he hecho antes a la menor provocación, ¿por qué no ahora que tantas cosas me lo reclaman? Sin embargo ahora la renovación será a fondo y eso me entusiasma y me asusta a la vez.



Y así mi vida comienza con un sentido introspectivo en el que planeo encontrarme a mi mismo de manera clara e inobjetable. Pretendo volver a mis orígenes, dar rienda suelta al artista que vive dentro de mí para que ahora yo viva dentro del artista. Necesito estar bien conmigo para poder estar bien con los demás.



Por lo mismo busco renacer como el fénix y levantarme de entre las cenizas para volver a surcar los cielos luciendo maravillosos plumajes, aunque para eso necesitaré morir, y qué mejor manera de hacerlo que crucificado.



Este 2008 cumplo 33 inviernos, tal como Jesús cuando, según la biblia y la historia fue crucificado. No me asusta que me crucifiquen, me asusta que lo hagan sin una razón que valga la pena; después de todo no se cumplen 33 todos los años y no se puede morir crucificado cada cumpleaños.



Por lo pronto, para la representación de crucifixión en la historia de mi vida, necesito los personajes trascendentales de la historia original, así que si alguien se quiere apuntar necesitaré un Caifás (se muere de ganas pero está temeroso de juzgarme), un Pilatos (que me deje a manos de la multitud), un Judas (el único capaz de traicionarme por el inmenso cariño que le tengo), un Pedro (que me niegue tres veces), un Simón (que cargue la cruz conmigo), una María de Magdala (que llore mi muerte), un Barrabás (que sea elegido en vez de mí para salvarse), un Dimas y un Gestas (que mueran conmigo) y un José de Arimatea (que me preste su morada eterna). Interesados favor de contactarme.



En fín, no es casualidad (en la vida las casualidades no existen, sólo hay causalidades), que mencione a Jesús y haga un paralelismo de mi vida con la suya. Últimamente me he sentido muy ligado al Jesús histórico, al que murió en la cruz aunque no haya resucitado, al que reconocen los judíos y los musulmanes como profeta, al heredero del trono de David; y justo es decir que cada día lo siento más cercano.



Mucho se asombrarán algunos de ustedes al leerme hablar así de un tema tan aparentemente ajeno a mí y probablemente se estén preguntando: ¿y ahora a éste qué le picó? La verdad es que han llegado a mis manos tres libros (El Mesías. El niño judío. de Anne Rice, La Esperada de Kathleen McGowan y El apóstol número 13, de Michael Benoit), que tan pronto leerlos han provocado este acercamiento y este sentimiento, y lejos de arrepentirme tengo ganas de leer más al respecto, por lo que no descarto pronto leer la biblia desde un punto de vista más académico y los evangelios apócrifos. Ya les contaré aquí mismo en qué terminan mis pesquisas.



Por lo pronto y sin mayor preámbulo, comienzo a vivir los primeros años del resto de mi vida con la plena confianza de que lo haré a consciencia, sin desgana, con el ánimo de saberme examinado a fondo pero con la certeza de salir adelante con la cabeza en alto, sabiéndome capaz de salvarme sin dejar caer los párpados pesados como juicios (con permiso de Benedetti). En fin, espero verlos en este año a todos y que sean todos testigos de esto que acabo de afirmar.

Un abrazo.

SiNfUlJaMeS